El legado de una visión filantrópica
Por: Bibiana Lucía Barreto Barbosa, directora de Filantropía, Unibagué
Hace más de cuatro décadas, un grupo de empresarios y líderes cívicos en el Tolima tomó una decisión que cambiaría el rumbo de miles de jóvenes y transformaría la dinámica de toda una región. Con una visión generosa y comprometida, estos pioneros fundaron la Universidad de Ibagué, una institución de carácter privado, sin ánimo de lucro, dedicada a promover el interés colectivo y la utilidad común. Aquello que comenzó como un esfuerzo para ofrecer nuevas opciones de educación superior en el Tolima, pronto se consolidó como un proyecto de transformación social y de desarrollo regional.
La Universidad de Ibagué surgió como respuesta del sector privado a la necesidad urgente de brindar oportunidades educativas de calidad, buscando que los jóvenes de la región pudieran acceder a estudios superiores y así contribuir activamente a sus comunidades. A lo largo de los años, la Universidad se ha convertido en un símbolo de filantropía, donde la educación y el desarrollo regional han ido de la mano, y han impactado positivamente en las vidas de generaciones de tolimenses.
Hablar de la Universidad de Ibagué es hablar de filantropía en su esencia más transformadora. Aquí, la filantropía no es solo una vocación de servicio, sino un compromiso social profundamente arraigado que busca generar un impacto positivo y duradero en la vida de los estudiantes y en la región. La Universidad se ha esforzado por ser un motor de equidad, facilitando el acceso a la educación para jóvenes talentosos provenientes de diferentes municipios del Tolima y promoviendo una sociedad más justa e inclusiva.
Este compromiso se refleja en la composición de su comunidad estudiantil: el 84,2 % de sus estudiantes pertenecen a los estratos socioeconómicos uno, dos o tres, y casi la mitad, 49,7 %, proviene de los estratos uno y dos. Estos datos resaltan el papel de la Universidad de Ibagué como una institución privada, pero comprometida con la equidad y el acceso educativo, un valor que el Consejo Superior y el Consejo de Fundadores han apoyado incondicionalmente. Así, se reafirma el compromiso de brindar una educación de calidad y accesible para quienes más lo necesitan.
A través de la Unidad de Filantropía, la Universidad promueve alianzas estratégicas con empresas, fundaciones y personas que creen en el poder transformador de la educación. Estas colaboraciones han generado un círculo virtuoso de apoyo y donaciones que sustentan cinco causas filantrópicas institucionales: Equidad y Oportunidad, Paz y Región, Conservación de Ecosistemas, Espacios de Co-creación y Bioeconomía. Cada donación contribuye al desarrollo de estos programas y ofrece a los donantes beneficios tributarios; un incentivo que fortalece este compromiso colectivo con la educación y el progreso.
El impacto de la filantropía ha sido significativo, pues entre 2020 y 2023 se han recaudado $4.064 millones de pesos, beneficiando a 1.373 estudiantes, de los cuales el 85 % son originarios del Tolima y el 90 % representan la primera generación de sus familias en acceder a la educación superior. Estos jóvenes comienzan a reescribir su historia y la de sus familias, transformando su vida y la de futuras generaciones. La generosidad de los donantes abre puertas que les permiten acceder a nuevas oportunidades y regresar a sus comunidades como agentes de cambio y desarrollo.
La razón más poderosa que impulsa este esfuerzo diario es brindar, a través de la educación, las herramientas necesarias para que los jóvenes tolimenses se formen como profesionales y contribuyan al desarrollo de sus municipios. Al regresar, ellos no solo promueven el crecimiento regional, sino que también se convierten en embajadores de la tradición y los valores de la Universidad, inspirando a otros jóvenes a seguir el mismo camino de superación. Este compromiso es un ciclo de retribución en el cual, a medida que los estudiantes se benefician, se genera un sentido de gratitud que los motiva a devolver a la sociedad el apoyo recibido.
En esta edición especial, quiero hacer un llamado a los egresados e invitarlos a conocer más de cerca el programa de filantropía de la Universidad de Ibagué. Con su apoyo se podría continuar fortaleciendo este legado y asegurar que más jóvenes tengan la oportunidad de alcanzar sus sueños y contribuir al desarrollo de la región. Que este mensaje sea una inspiración para continuar construyendo juntos una sociedad más justa, solidaria y comprometida con el progreso del Tolima.
